La parafina es una forma de terapia de calor superficial que utiliza cera de parafina calentada para aliviar el dolor y la rigidez en las articulaciones y los músculos. Se utiliza comúnmente en fisioterapia, terapia ocupacional y tratamientos estéticos.
Cómo funciona:
La cera de parafina tiene un punto de fusión bajo (entre 124 y 130 °F, o 51-54 °C), lo que permite aplicarla tibia sobre la piel sin causar quemaduras. La cera tibia crea un sello hermético alrededor del área tratada. Este sello ayuda a:
Aumenta el flujo sanguíneo: el calor dilata los vasos sanguíneos, mejorando la circulación y aportando oxígeno y nutrientes a la zona.
Relaja los músculos: El calor ayuda a relajar los músculos tensos y reducir los espasmos musculares.
Alivio del dolor: el calor puede bloquear las señales de dolor y reducir la inflamación.
Hidrata la piel: La parafina actúa como emoliente, hidratando la piel y suavizando las cicatrices.
Indicaciones comunes:
La terapia con parafina se utiliza para tratar una variedad de afecciones, entre ellas:
Artritis: Osteoartritis, Artritis Reumatoide
Fibromialgia
Tendinitis
Bursitis
Esguinces y distensiones
Cicatrices
Piel seca y agrietada
Espasmos musculares
Contracturas


Métodos de aplicación:
Existen varias formas de aplicar la parafina, siendo las más comunes:
Inmersión repetida (inmersión y re-inmersión): la parte del cuerpo (generalmente las manos o los pies) se sumerge repetidamente en la cera derretida, creando varias capas.
Inmersión y envoltura: La parte del cuerpo se sumerge una vez en la cera y luego se envuelve en plástico y una toalla para retener el calor.
Baño de Parafina: Un recipiente especialmente diseñado para mantener la cera de parafina derretida a una temperatura constante.
Procedimiento general:
Preparación: Se limpia y seca la zona a tratar y se retiran las joyas.
Aplicación de cera: Se elige el método de aplicación adecuado.
Envoltura: Se envuelve la zona tratada en plástico y una toalla para retener el calor.
Tiempo de espera: La cera se deja actuar durante 15-20 minutos.
Eliminación de cera: La cera se retira y se desecha.
Ejercicio (opcional): se pueden realizar ejercicios suaves para aprovechar el aumento del flujo sanguíneo y la relajación muscular.
Hidratante: Se aplica humectante en el área tratada.
Contraindicaciones:
La terapia con parafina no es adecuada para todos. Las contraindicaciones incluyen:
Heridas abiertas: La cera no debe aplicarse en heridas abiertas, cortes o ampollas.
Infecciones de la piel: La cera no debe aplicarse en zonas con infecciones de la piel.
Mala circulación: Las personas con mala circulación deben consultar a su médico antes de utilizar la terapia con parafina.
Pérdida de sensibilidad: Las personas con pérdida de sensibilidad en la piel (por ejemplo, debido a una neuropatía diabética) pueden quemarse sin darse cuenta.
Alergia a la parafina: aunque es poco común, algunas personas pueden ser alérgicas a la parafina.
Enfermedad vascular periférica: contraindicada porque el calor puede agravar la afección.